Como un escarabajo suburbano
que empuja diariamente su rutina:
con su cepillo irá de esquina a esquina
juntando el desperdicio circadiano.
Invisible e ignorado ciudadano
del que ambula,el vecino y la vecina
tararea unas coplas de Sabina
trabajando en su círculo borgeano.
La señora que va al supermercado
repitiendo la lista; y abstraída;
lo mira mientras pasa por su lado.
El saludo la encuentra distraída
y al volverse y verlo allí parado
le da los buenos días conmovida.
A veces la salida
de un túnel que no va a ninguna parte
es la que algún ¡BUEN DÍA! nos comparte.