Me iluminas como la luna llena
Ilumina la tierra castellana.
Tu mirada inmaculada y bella
recorre mi cuerpo hasta la medula.
Tu sonrisa radiante
revoluciona mi mente.
Eres un ángel caído del cielo,
con cuerpo de diosa del Olimpo.
Te esculpo en esculturas
en forma de poemas
que perduraran en el tiempo
como el Coliseo romano.
Descubre estas viejas tierras
llenas de melancolías
y cultívalas de arboles de ilusión
para repoblar el corazón.
De tus pies nacen flores
tan radiantes como soles.
Provocas primaveras
y los ríos de sangre alteras.