te invito a que entres
en todo mi ser
pero no como alguien que entra
en un elevador o
a una tienda o como
quien llega tarde al trabajo
que sea sin prisa, sin urgencia
no como las manecillas del reloj
pasar sin haber tocado
tocar sin haber dejado huella
llegar y marcharte
sin haber estado conmigo
sin saber de mí
sin saber
como tiembla mi cuerpo
de si tengo frío o calor, o
de esta sed que estoy sintiendo
no vengas si te tengo que esperar
cien días de esperanzas y
en vez de llenar mi cuerpo
lo dejas aún más vacío
si no te vas a quedar dentro de mí
mejor no vengas
quiero que entres por mi piel
a fuerza de constancia y
permanencia
por absorción
como si tú fueras llovizna y
yo fuera pasto, y lloviera todo julio
como si fueras la sábana
la toalla, mi abrigo
el sol sobre mi piel
quiero que entres
por mis rodillas
por la planta de mis pies
por mi pelo, mi nuca, mis poros
hasta que sin prisas y
sin ruidos
tus pulmones sean como míos
tu corazón sea como mío
en el mismo espacio
con el mismo ritmo
la misma longitud, la misma luz
hasta que nuestra respiración y
nuestros latidos coincidan
entonces tú
siendo parte de todo mi ser
me llenes y te quedes conmigo
dentro de todo mi ser