No sabes de caricias,
ni siquiera de besos
y eso que te lo has pasado
de cama en cama,
de cuerpo en cuerpo,
de olvido en olvido
jugando a no amar,
pero no es tu culpa,
te han usado
y desechado
como un trapo viejo.
De lo que tú sí sabes
es de soledad y de abandono
y conoces muy bien la tristeza
de largas noches insomnes
añorando ser amada,
no necesitas decir nada
por ti hablan tus ojos.
No es tu culpa.
Alexander Elías2023
#SerEscritura