OSCAR LUIS GUZMAN

INTREPIDEZ (c)

Al cometer el delito de amar,

con absurdo y fuerte ardor,

siento en mi pecho dolor

y hasta pierdo el apetito...


Creo que debo preguntarme

y a mí mismo me auto-juzgo;

aunque les parezca absurdo

teniendo uso de razón:


¿Acaso el tener pudor

implica ser inconsciente

a las pasiones latentes

que brotan del corazón?

 

¿Acaso sólo es bendito

quien tiene alma granito

y un corazón de diamante?

 

Con intrepidez lo digo,

y con gran austeridad,

aunque al decirlo maldigo

y reniego a la verdad:

 

Que al amar como yo amo,

atribuya yo a mi amante condición angelical;

pues su actitud destructiva,

cruel, indómita y altiva,

me revela claramente:

SU FALSA DIVINIDAD...

Por tal, debo concluir

que amando como yo amo,

me he convertido en esclavo

de indómita condición;

pues dejo que el corazón

Sea el amo intermitente

del cerebro y la razón.

 

*