Si el mundo no fuera redondo,
y a caso plano,
te juro que me iría derechito a tu lado.
Y si el mundo fuera precioso,
te juro que te recitaría los más preciosos poemas que jamás habían escrito.
Pero el mundo es un horror,
y tú estás lejos y el mundo está redondo y al revés.
Y confabula todo en contra de nosotros.