Su rostro acorazonado
lo va mirando la luna
en horas que son nocturnas
con sombras que deja al paso.
Sus ojos anacarados
le brillan como agua pura
su cuerpo viste camuflas
y aruña, aunque no creamos.
De leyendas y de cuentos
está llena su existencia.
¿Quién será, yo le pregunto?
No me diga que es el cuervo
por ser negro y porque vuela,
porque en versos no lo ilustro.