Lucy Shines

LOS COLIBRÍES

En mi patio hay un árbol cargado de flores rojas,

flores tan dulces que atraen a numerosos colibríes,

y no solo a colibríes, sino también a abejas y mariposas.

Mi gatito ama a ese arbolito,

por él se trepa, llega hasta la copa

pero no logra alcanzar a los veloces colibríes.

Ellos no paran de batir sus alas,

resalta su color verde brillante,

parlotean, se comunican,

los rodea un halo de misterio.

Yo me detengo a observarlos,

ellos  parecen atrapar

al universo entero entre sus alas.

 

Susy Espeche