Ternura en tu mirada,
la llama del placer,
va quedando sofocada
en un hermoso amanecer
habiendo estado unidos en la madrugada.
Secretos que guarda la alborada
que el Astro Rey desea saber
escondidos bajo las almohadas
dulces como la miel, sólo la Luna los ha de conocer,
nuestra Maga Blanca y silenciosa Hada,
bajo su luz nos entregamos nuestro ser.
Mientras lentamente caía por la espalda tu sostén,
un beso de tu boca, me convertía en tu rehen,
arrancando de mi cuerpo la camisa,
te aferras a el con prisa,
y el viento que entró por la ventana,
me impulso a que te abrazará y no te soltará, hasta la mañana.