Y si algún día la ven,
sí por un acaso coinciden en algún lugar…cuando yo ya no esté,
si el destino llega tarde…y nos deja sin opción,
sí nos separa sin mediar explicación,
sí nuestro alejamiento se consuma …
y el adiós se presenta sin anunciar.
Si ese día acaece sin dar vuelta atrás,
sí inevitablemente he de partir…
y no vuelvo a soñarla nunca más.
Si la eternidad me sorprende,
sí vuelo al infinito sin avisar,
sí lo sempiterno me llama…
y decido exiliarme para siempre en aquel bello lugar.
Cuando me borre inexplicablemente de la existencia…
y mi conciencia desaparezca… en el limbo de la imaginación.
Cuando amanezca y ya no esté aquí para emprender,
cuando despierte en un luminoso espacio de quietud…
y toda mi ansiedad se haya convertido en paz.
Entonces,
impostergablemente… díganle,
cuéntenle que siempre la espere,
que desde que se fue…
la aguardé con devoción…
la quise con toda mi pasión,
y que siguió palpitando en mi corazón…hasta mi último latir.
Que sembré una rosa roja en mi jardín…
y la regué mientras no estaba…con toda mi ilusión,
que cuando llovía salía a verla bailar con sus pétalos en flor,
y mientras el sol canicular arremetía…mi sombra fría la protegía… y la hacía suspirar.
Cuéntenle,
díganle…
que ella fue mi verdadero amor.
y que nadie más… me hizo sentir así,
que desde ahora…y hasta siempre …
será parte de mí…hasta la inmortalidad.