En mi ciudad el amor
Se perdió en un laberinto
De murallas y recintos
De absoluta privacidad
Un ojo no es un guiño
Una boca es un cinto
La sensualidad un extinto
Ser mitológico ancestral.
Una mano es engañosa
Si no es la tuya propiamente
La confianza en la gente
Se perdió en el mas allá
Todos buscan el amor
Los buscan afanosamente
Pero nadie es diferente
Callan al verlo llegar.
A los hombres se les ve triste
A las mujeres ausentes
Gritando en su inconciente
Con un silencio mortal
Aquí se muere el amor
Se muere diariamente
Y hoy indiferentemente
Asistí a su funeral.
Allí estaba el amor
En su tumba fosforescente
Pidiéndoles a sus parientes
Una explicación verbal
Hubo varios discursos
Con el llanto consecuente
Y acuerdos tácitamente
Para el amor salvar.
El cementerio cerró
Se marchó toda la gente
El amor duerme por siempre
Con sus flores de carnaval
Los hombres también duermen
Mañana habrá que ponerle
El hombro nuevamente
Para su muerte olvidar.