Hoy te amo sin maromas ni gritos,
Demuestro mi sentir con tranquilidad,
Ya no prometo amores infinitos,
Ni tampoco una eterna felicidad.
Ya no me queda el saco de Romeo,
Está tan desgastado que ya da flojera,
Ahora de las situaciones bromeo,
Pero sigo cayendo en tu mirada hechicera.
Te amo sin aspavientos ni sobresaltos,
Las fantasías ahora las presencio,
El amor no lo consigo con asaltos,
Ahora lo hago muy en silencio.
Versos cortos sin paradojas baratas,
Lo que escribo lo escupo de mi alma,
Prefiero las tristezas inmediatas,
Y vivir el desamor con demasiada calma.