Mercedes Bou Ibáñez

Grito a la humanidad Verso blanco

Grito a la humanidad

Silencio espeso que alumbra
esa soledad latente
que invade los pensamientos
de todo humano que sueña
esos mundos que unos dicen
que florecen en los sueños,
de las almas que no rinden
a la ilusión de volar.

Esos mundos que si existen
tienen cerrada la puerta
a corazones que nunca
aprendieron a soñar.

Esos mundos que de niños
pintamos color de rosa
y que al pasar de los años
dejamos en el rincón
donde se pudren los sueños,
que murieron sin saber,
que con libertad tan solo
se puede alcanzar la paz.

Esos mundos que perdimos
al no poder encontrar
la llave para la puerta,
esa que abre los cerrojos
de caminos que conducen
a ese mundo donde viven
las almas libres que quieren
ir sembrando por la tierra
las semillas del amor.

¡Qué todos somos hermanos,
con derecho al mismo pan!
¡Qué nadie tiene el porqué
decir; ¡Qué la tierra es mía!
Y así quitarle al vecino
ese placer tan sagrado 
de recorrer al galope
por todo lo ancho de un mundo
que de nadie es propiedad.

¡Busquemos todos la llave,
que abrirá los corazones
al principio de equidad!
¡Qué todos somos hermanos!
¡Del mismo barro salidos!

Acaben ya los silencios,
encuentre la paz el mundo,
con el amor por bandera
y su emblema la bondad.

¡Despierten ya corazones
y que vuestro grito salve
a toda el alma que sufre
por falta de humanidad!

Verso blanco en la literatura universal: 

La literatura clásica griega y latina no contenía rima,
 lo mismo que ocurre con el verso sciolto italiano. 
Sin embargo fue la literatura inglesa la que hizo que el verso blanco 
se popularizara en forma de pentámetro yámbico. 
Esta es la forma más utilizada en el teatro isabelino.
A continuación unos versos de Lear, rey y mendigo, 
una traducción de El rey Lear de William Shakespeare 
en la que Nicanor Parra busca aproximarse a la métrica original.

Soplad vientos
Hasta hacer explotar vuestras mejillas!
Acción! Soplad!
Huracanes cataratas del cielo volcaos
Sobre los campanarios y las torres
Hasta que no se vea ni una sola veleta.
Rayos sulfúricos
A la velocidad del pensamiento
Precursores seguros de la centella
Que parte en dos la encina
Chamuscad mi cabeza blanca!
Y vos trueno que todo lo sacudes
Aplanad el planeta!
Rompe los moldes de la naturaleza
Aniquila los gérmenes y las semillas
Para que nunca más
Vuelvan a procrearse hijos ingratos!

En este ejemplo verás que son asonantes , 
veleta, centella, naturaleza, planeta
a pesar de ser un poema sin estrofas, 
no se consideran rima por estar lejanas,


Verso blanco en la literatura española: ejemplos
Boscán fue el que introdujo el verso blanco 
en la literatura española con su Hero y Leandro. 
A continuación algunos versos:

Canta con boz süave y dolorosa,
¡o Musa!, los amores lastimeros,
que\'n süave dolor fueron criados.

Canta también la triste mar en medio,
y a Sesto, d\'una parte, y d\'otra, Abido,
y Amor acá y allá, yendo y viniendo;
y aquella diligente lumbrezilla,
testigo fiel y dulce mensajera
de dos fieles y dulces amadores.

Se puede observar que hasta incluso en la misma estrofa 
hay rimas en asonante, pero el hecho de no seguir 
ningún tipo de esquema de rima, se convierte en verso blanco.
 En este poema; lastimeros, medio y viniendo


También fue utilizado por autores como Garcilaso, Lope de Vega y Quevedo.

Mas ninguno de todos llamar puedo
más bárbaro que yo, pues contra el arte
me atrevo a dar preceptos, y me dejo
llevar de la vulgar corriente, adonde
me llamen ignorante Italia y Francia;
pero, ¿Qué puedo hacer si tengo escritas,
con una que he acabado esta semana,
cuatrocientas y ochenta y tres comedias?

En esta; dejo y puedo son asonantes. 
O sea se llama verso blanco a la composición poética 
que no tiene esquema alguno de rima, 
aunque en algún momento coincidan dos o más versos que rimen, 
pero viendo claro que lo hacen sin un esquema de rima determinado

En este de Vicente Alexandre, 
repite hasta una misma palabra en las dos estrofas, 
VIDA y dos palabras en asonante, SIEMPRE, RUGIENTE, una en cada estrofa.

Deja, deja que mire, teñido del amor,
enrojecido el rostro por tu purpúrea vida,
deja que mire el hondo clamor de tus entrañas
donde muero y renuncio a vivir para siempre.

Quiero amor o la muerte, quiero morir del todo,
quiero ser tú, tu sangre, esa lava rugiente
que regando encerrada bellos miembros extremos
siente así los hermosos límites de la vida.

Vicente Aleixandre


El poema de versos blancos ha de cumplir dos condiciones:

1) No tener una estructura de rimas. 

Se denominan poemas con rima o los poemas cuyos versos 
tienen algún patrón de repetición fonética total 
a partir del último acento (rima consonante) 
o sólo vocálica (rima asonante). Por ejemplo, 
un cuarteto de rima consonante en cuyos cuatro versos 
rima el 1º con el 4º y el 2º con el 3º, 
o un romance en que riman los versos pares en asonante.

En los poemas blancos pueden existir asonancias no estructuradas. 
O sea, versos próximos (separados por menos de tres o cuatro versos) 
cuyos finales tengan rima asonante. Hay división de opiniones respecto 
a si esas asonancias repartidas sin una estructura fija empobrecen el verso, 
unos poetas tratan siempre de evitarlas y otros no tanto. 
En todo caso, creo que un exceso de esas asonancias 
le da unos soniquetes al poema que no favorecen al verso blanco.

2) Tener una estructura armónica todos los versos del poema entre sí, 
que es lo que denominamos “ritmo métrico”.

Estas estructuras armónicas dependen de dos factores: 
El metro de los versos, o sea su longitud en silabas fonéticas 
(que no siempre coinciden con las ortográficas) 
y las alternancias acentuales de sus sílabas que es lo que marca el ritmo.

El metro de los versos no tiene que ser el mismo 
en todos los versos del poema, pero sí que debe de ser 
de longitudes pares o impares, 
teniendo en cuenta que en los versos compuestos 
lo que cuentan son los hemistiquios que los forman y no el metro total del verso.

Lo que se desprende de este artículo,
 es; que si se ponen muchas asonancias 
el poema en verso blanco se empobrece, 
pero que se empobrezca no quiere decir 
que no pueda haber alguna asonancia, 
por supuesto que cuanto menos peque de asonancias, 
más puro será, pero seguirá siendo poema en verso blanco, 
siempre que no siga ninguna estructura de rima.

Con ayuda de la Wilkipedia