Alejandro José Diaz Valero

Pasarela vecinal

Cuando algo caro se abarata, seguramente ha perdido su gracia. (Alejandro Díaz)

 

Estaba yo de maravilla

contemplando el paisaje

cuando de pronto en un visaje

vi pasar por la ventanilla,

a mi vecina alegre y sencilla

que iba pasando presurosa,

con un vestido que alegre brilla

al compas de sus delgadas pantorrillas.

Sus ojos inquietos y veloces

chispeantes como cerillas

iba caminando en distintas poses,

Lanzando miradas a hurtadillas;

y en esas pasadas tan veloces

cuando pasó frente a mi casa

solo vi que la ropa amarilla

que ajustada a su figura flaca

mostraba sus doce pares de costillas.

***