jvnavarro
POEMA REGADO CON VINO TINTO
Hoy buscaba un bolígrafo
y me he encontrado
en ese trasiego y camino,
con una copa de vino,
ya en su punto,
dispuesto para ser bebido
y he cambiado la tinta
por los taninos.
Viendo venir el asunto
he escrito una poesía,
en honor a la verdad,
la he reescrito,
al revés de como yo quería,
por aquello de darle un pulso
al oráculo de Delfos
donde una Pitonisa me dijo:
«Ἐν οἴνῳ ἀλήθεια».
Me subía el vino,
notaba su calor,
algo intuitivo me decía
que tenia que arrancar
y meterle marcha al asunto,
así que me dispuse a escribir,
creo, no me hagan caso,
que lo hago de continuo.
Con tinta de color azul
señalaba los verbos intransitivos,
les ponía encima de la letra \"i\"
un puntito;
y a la \"a\" un rabito;
con la \"o\" me entretenía
y le sacaba un redondo,
muy redondito,
allí donde dicen los técnicos
que habita un brujo
esperando un regalo votivo;
con la \"e\" ni jugaba,
es mal asunto,
es el punto \"G\"
del aparato cognitivo
y toma valor y sentido
con los polisílabos;
¡Ay de la \"u\"
un sinsentido,
es una letra fea
hecha con tres palitos!
Tantas cosas hago
y me encuentro
tan en mi gozo,
tan entretenido,
que cuando veo una botella de vino,
me pongo en posición receptora,
es decir abro la boca un poquito,
elevo el brazo
y ya el útil elemento de cristal
y en su interior el liquido,
en posición frontal
\"dominada supina\",
dejo que toque los labios
y me lo llevo hasta allí mismo
donde una campanilla avisa
que es domingo.
Ya de vuelta
de tan ignominioso trance
Tuve que reactivar
el cerebelo y pedúnculos,
endiosados por los efluvios,
para bajar otra vez a la tierra
a hacer lo mismo
que estaba haciendo
antes de comenzar este poema
de clasificación, vino fino,
Reserva, Tinto: 12 meses mínimo