En el amanecer del día
de esta blanquecina primavera,
imagino tiempo para cultivar
un sueño de creador…
Con los contenidos,
de una poesía subyacente,
que surge de mi voz,
incinero los prejuicios
y sin ningún compás
voy expresando señales internas,
para quien las quiera escuchar.
Escribo a diario algo más que poesía,
con ansias de apropiarme
del sentido de la palabra justa,
consciente y dispuesto a explorar,
agrego a cada verso, un silencio
y en cada coma, una canción.
Preparándome para vivir,
en los tiempos de la emoción,
escribo presto… y mi perspectiva
tiene un delirio de verbos dispersos,
locura, que confronté en poesía:
sintaxis de puntos y elipsis;
cadenciosa escritura, que amasa
en este verso, un deseo de razón.