Primero cuento ocho sílabas
muy fáciles de rimar,
una gran diversidad
que yo armonizo con calma;
luego busco las palabras
que me lleven al final,
algo que se leerá
y que encenderá la llama;
algo que tenga sentido
o que exprese mi sentir
o lo que ayer discutimos;
emociones que viví,
lo valioso de un amigo
algo que te haga feliz...