la polilla flotó
libre de culpas
posando el escote de ópalo
en cierta rosiblanca constelación
Desde la ventana al fuego eterno
se forma un hombre a duras penas
frota su embozo grandilocuente ante
dama con superficie de nutria bajo
cristales Su pestaña deslizando cuesta abajo
las extremidades los ojos cinturón
sabe juegos de mano
conque hacer la corte
Más allá surgen aparejos
discurriendo sobre el disco
trazado con esmero
más una evocación de nieves
que azulearan cuanto se nombró
Acaso perdiera gravedad la balanza
al cronometrar un ave en vuelo?