Eras como lucero en el cielo
brillando en la noche oscura,
Y esa luz sirvió de anzuelo
enganchándome con dulzura.
Quería sentir también esa calma
la que transmites al mirarme ,
pero siento que se me va el alma
porque solo es fantasía al despertarme.
Tengo miedo que se desplome
ese castillo de naipes de sonrisas,
y que solo al girarme a medianoche
no haya rastro de nuestras rimas.
Quizás es mejor verte de lejos florecer
y así sacar lo que quede de ti en mi ,
aunque sepa que al hacerlo desaparecer
se borre el camino que me trajo hasta ti.