Hoy me veo envuelto en estos gajos de tristeza
que me alejan del milagro de poder liberarme,
de poder caminar enamorado mirando las estrellas
sin presagios que algo un día podría dañarme.
Hoy soy un producto de mis guerras internas
mi sombra es una hoja más para arrastrarse,
una redención de mis palabras y quimeras
una composición de sueños y crueles realidades.
Hoy soy solo la distancia de nostalgias verdaderas
una lluvia infinita en el preludio de una tarde,
el corazón de una flor latiendo su primavera
y una cruz del tiempo diciéndome: ya es muy tarde...
Hoy sigo en esta orilla deshojando mis penas
escéptico del final que al fin habrá de llegarme
mientras mi vida avanza tan veloz y tan lenta
hacia el punto final donde nadie podrá rescatarme.