Allen Andree

CARMÍN

Dibujo \"no\" que explique el presente

los corderos ya no son de Dios

la magia es una savia en el medio de las esperanzas

lo que venimos a hacer nadie lo sabe

y por eso todos solo ayudan a su tribu

todo pertenece a todo

y algo propio es ya algo que no nos pertenece

la Luna sabe de dónde vino y a dónde irá

un olvido recorre sus cicatrices

y la hace ver solo todos los cometas de su regazo

qué ceguera motiva hemisferios donde ninguna genuflexión es adecuada

las letras están hechas así y jamás se dirá lo que realmente ocurre

no por voluntad siniestra

sino por pura incapacidad

entonces no importa si uno ya estuvo aquí una miríada de veces

entonces no importa si nos vemos en el reflejo de los mares

y el mundo avanza y dejamos de ser los mismos después de los siete años

porque suponemos que la sinceridad es dolorosa

y que el velo de las cortinas es un filtro necesario

no sabemos de vergüenzas nuevas porque las tenemos todas

y proyectamos la salida de aquí a veinte o doscientos años

como si la certeza fuera el consejo de un amigo

como si la condición que nos adhieren no contradijera todas las entregas

y nos entregamos a una convicción que se hace a cada instante moda

porque la profesión de los astros nos lo indica

porque cada cinco segundos se parpadea en serio

entonces la pátina de la vida y del alma se recoge

entonces entonces

sacudimos las miradas pensativas y las guardamos en los bolsillos

se nos caen y suenan como monedas mal distorsionadas

luego el compromiso es un tema que se creó por estar por aquí

luego la puntualidad es la mayor de las virtudes

y todo se concatena con el maestro

y todo lo que dicen en su lengua los médiums es la descripción de algún mesías

salvación siempre necesitaremos

más allá de la confianza de los padres

que solo saben cascar decepciones

en este boulevar venido arriba

y visto con claridad a lo lejos

nos describen el esfuerzo como si no pudiera ser también nuestro

y en las sillas la electricidad es un bien escaso

y el universo no se acaba en los rostros

que nos hablan más del mundo perdido y de la nostalgia de no tenerlo

que nos hablan de las puertas que no se quieren abiertas

pero que de todos modos pretendemos abrir

y que sin querer no pierden sus llaves