Jorge L Amarillo
Temerosa y callada esta mi alma
Cuan temerosa y callada está mi alma
al ver como se agiganta esta soledad
mientras al reloj se le vuelan las horas
presurosas al pasado adonde morirán.
Siento los golpes al latir mi corazón
mientras el aire es denso al respirar
postrados y sin magia mis sueños
que de mi lado ya no se apartarán.
No hay quejas al caer mis lágrimas
ni horizontes que me puedan ilusionar,
ni hay un abrazo de amor tan profundo
profundo como un inmenso mar.
Invisibles penas que ahora se amarran
a lo que mi nostalgia solo quiere deshojar,
efectos del veneno que me dejó su olvido
como una gota de lluvia sobre el cristal.
Tu nombre se esconde en la atmosfera
y el beso de tu boca un poco más acá,
más el recuerdo de tus ojos negros
atormenta a mi pasión en mí suspirar.
Anclado aquí con este dolor y a solas
dentro de mí todo es una tempestad
y me recluyo con esta gran incógnita:
Si algún día conmigo querrías regresar...