Seré como la brisa invisible y silenciosa
que no saben tus ojos cuando pasa
juega entre tu cuerpo, te abraza,
y en su ligera tersura, te envuelve cariñosa.
Seré como el pajarito de dulce garganta
que en la sombra del arbusto se esconde
que se escucha su trino quién sabe dónde
pero que en secreto, a tí te canta...
Seré como la flor que su aroma despide
y rogando cerca de tu mano te pide
que la sostengas con tierno amor.
Y en tí mi sueño estará concebido,
pues todo el tiempo habré vivido
dándote mi amor en sagrado olor.