Al parecer la grandeza no se mide en el corazón,
se mide en la etiqueta que la gente puede ver.
Al parecer el buen corazón paso de moda,
Hace falta que te estrujen el alma para que quieran quedarse,
Hace falta que te arranquen el corazón para poder amarte.
Lo entendí a la mala,
Cuando todo lo di, cuando mi corazón no era más mío y el alma
mil pedazos estaba,
Te fuiste en silencio, sin decir una palabra,
No sabes cómo dolía ese silencio,
Ese silencio que odiaba, y que solo eso supiste dar,
Siempre te espere pacientemente,
Esperaba que llegaras como lo habías prometido,
Pero se te olvido que yo existía y no sabes cómo me costó
entenderlo.
Siempre pensé que mi buen corazón podría vencer esa timidez,
Pero me di cuenta que realmente te gusta todo lo fácil,
Yo era una chica complicada, a la que tenías que romperle la barrera del silencio,
La que tenía tres corazas para traspasar,
A la que tenías que amar solamente sin importar lo que quería,
Pero al parecer, eso al final, no importaría.
Al parecer no era la indicada, Merecías algo más; una de esas chicas de revista que son
sexis y se visten bien a tu mirar, de esas chicas que les gusta
usar maquillaje y no temen mirarte sin vacilar.
Por supuesto no era yo, una simpleza no puede ser llevada al
palacio, ahí donde el banquete es de fiesta y las luces de
colores para iluminar tu belleza.
Al parecer no era yo,
Esa que deseaba hacerte feliz, aquella que añoraba con llegar
y rodearte de amor, no, eso no era suficiente.