Yo , no soy yo,
soy la huella ya pisada,
la estrofa a medias,
el beso herido que espera
y las manos trenzadas.
Soy la mirada y los ojos,
la cabellera crespa,
la sonrisa que despierta
los labios semiabiertos
y la boca desierta.
Soy la ola lamiendo arena,
el viento sin tormenta,
la aurora que se esconde,
los dedos que escarban
y el invierno en primavera.
Yo... no soy yo,
fui yo, cuando te amaba.
Cuando contabas a ciegas
estrellas y luceros
y rosa entre tus piernas.