Tengo frio de ausencia,
La distancia enturbia mis sentidos;
Mi corazón se queja disimulado,
Solo en un faro sin luz me he convertido.
Y tu allá, y mas allá sin mí,
Donde el eco no remeda mi voz
Y el pensamiento aturde sin prisa;
Solo en la calma del apaciguado dolor
Se me fracturan los sonidos del corazón
Y tú allí; como una sombra fugaz
Que desliza por entre los lienzos oscuros de mi soledad.
Te busco en cada instante que respiro,
Por los pasillos de la atormentada ilusión;
Sé que vives en cada latir, en cada suspiro
Y por tu sinfigura sufre mi corazón.
Me he pintado mil mañanas con tu rostro
Y el absurdo no me deja ser cuerdo;
Tu presencia habita en mí, noche y día
Y mi corazón vive por tu recuerdo.