El café de la mañana
con un delicioso pan,
cuánto placer nos darán:
un impulso que levanta;
una alegría temprana,
casi todos lo hallarán
y gran fuerza encontrarán
al dejar al fin la cama;
luego, alguna actividad
para cuidar la salud,
para todo preparar
con tesón y gran virtud:
la vida hay que disfrutar
e irradiar tan solo luz...