Avanza la noche, pronto llegara la madrugada,
Me desvelo tu imagen, y el concierto de grillos
Que cantaron en nuestro honor.
Te quedaste dormida enrredada entre mis brazos
Me llego tú calor y a tu dulce fragancia la aspiro una y otra vez,
Son mi delirio tus labios tan tiernos, que te robo un beso
Y lo guardo para después.
Digo tu nombre (Cristina) y un te amo en este silencio
Me rindo a tus pies,
Y quisiera que me lleves a conocer tus sueños,
Mis manos temblorosas acarician tus cabellos
Y me invade el dulce aroma de tu piel
Que guardare por siempre en mi corazón.
Los rayos del sol, sin permiso penetran por la ventana,
A lo lejos se escucha el murmurar de la gente por las calles,
El trinar de los pájaros que revolotean en las copas de los arboles
Me anuncia que ha llegado un nuevo día.
Entonces, de repente, se abren tus ojos y me sonríes,
Me besas, y en simples palabras me dices.
Soy tuya para siempre.
En ese momento descubro el amor eterno.