Elogio de Laura
Laura la iluminada y Laura la que ilumina,
aparentan ser siete, pero sólo son dos:
La dueña de su canto, la reina de su rima
y la que intímamente se confiesa con Dios.
Laura la catedrática y Laura la erudita,
nos van narrando sueños y descifrando mitos.
con sencillez humilde, como el agua bendita
que se escapa del templo y abomina los ritos.
Es bella porque es bella, porque así lo dispuso,
porque ya estaba escrito y no hay dónde agarrar,
es bella como un poema luminoso y confuso,
tan profunda y tan amplia como el cielo y el mar.
Sus manos elegantes, delgadas y sinuosas
que escriben y declaman los poemas más diversos,
han roto corazones, han deshojado rosas...
y han hecho que me ponga a escribir estos versos.
Mi elogio, amiga mía, como una flor marchita
hoyada por las botas, ajada por los gritos,
igual que tú es humilde, como el agua bendita
que se escapa del templo y abomina los ritos.