Los hombres machos no lloran
reza un dicho popular,
pero el hombre llora solo
y lo hace en cualquier lugar.
Lloramos de alegría
cuando logramos triunfar
y también por una derrota
mucho podemos llorar.
Se llora por un dolor
que no se puede aguantar
y el llanto como terapia
mucho nos puede ayudar.
Llorar no es de cobardes
ni tampoco de miedosos,
llorar es un mecanismo
que a veces produce gozo.
También podemos llorar
por una separación,
pero todo en la vida
tiene una compensación.
La mejor forma de llorar
y lo digo sin ningún temor,
es cuando en algún momento
lloraremos por amor.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,29/09/2023.