racsonando

¡Si pudieras, si yo pudiera...!

 

Si pudieras, si yo pudiera...

contemplar las luces de nuestro cielo,

alumbraríamos  despacito mil lunas

con sus anhelos;

moveríamos de izquierda  hasta derecha los soles de los silencios.

Si pudieras, si yo pudiera... habría dulce tizón  de fuego.

Si pudieras, si yo pudiera...

en cada punto cardinal arar las sementeras de nuestro suelo,

habría un solo manojo de surcos y espigas de amor secreto.

Y si pudieras con tus ojos,

lágrimas  si yo pudiera...

habría un solo universo y se pintaría de alegrías  hasta la sed de los imperios.

Si pudieras, si yo pudiera... escribir en las hojas de cada árbol nacido de nuestro pecho,

un poema, una canción, un cuento o los simples garabatos para iniciar un verso.

Una plenitud de dichas

y una libertad de apegos

volaría muy alto y con alas para los miedos.

Si pudieras, si yo pudiera... llegar hasta donde despunta el día  el alba de nuestros sueños.

La luna desnudaría sus luces de lumbre estaño y sombras en nuestro lecho.

Su pudieras, si yo pudiera...

ser camino y flor y corazón y flecha y piedra

y mano que busca su consuelo.

Seguros de nuestro amor y candadito sempiterno

Si pudieras, si yo pudiera...

ser todo y cuánto anhelo,

y rodearnos entre  abrazos con la música de un arpegio.

Habría alas en que dormitan los secretos y misterios.

Si pudieras, si yo pudiera... me haría el beso de tus besos,

entregaremos juntos los te amo, para dejar de lado los te quiero.

¡Si pudieras, si yo pudiera... !