¡Oh! tierra bendita,
que nunca fuiste árida,
he plantado con fe
usando mi escardillo,
y nueva semilla ha germinado...
Hazla crecer tierra bendita,
dale de tus aguas,
bríndale tu amor,
háblale, cántale...
dale todo de tu ser.
Acógela en tu vientre,
que plante su raíz,
y que crezca día a día,
y que brille como el sol...
¡Oh! Tierra bendita,
tu fertilidad me llena,
tu bondad me enternece,
me alimenta y me sacia,
!Oh¡ Tierra amada,
siempre eres luz,
siempre serás vida...