Que nuestros versos y escritos hagan honor a las víctimas de la violencia,
Que estas letras sean el aliciente para las familias huérfanas y destruidas.
Que nuestro mundo no sea indiferente al dolor y a la tragedia de los inocentes.
No podemos seguir dándole la espalda a la realidad de la crueldad de la guerra.
No puede ser que la voz de miles esperanzados en la paz, se pierda con el viento.
No hay esperanza, si no hay unión verdadera entre los pueblos y naciones.
Cuando las niñas, niños y jóvenes jugaran tranquilos sin el temor de las balas.
Cuando nuestros ancianos contaran solo historias de amor y reconciliación.
Cuando un mundo mejor, para crecer en amor, amistad, cariño y comprensión.
G3