Te prometí cuidarte y darte mí amor
toda una vida, pero nunca andar tras
tuyo rogandote para que te quedes
conmigo. O que me ames, que pena
me causaste rogandote para que
estés en mi regazo, ardiente amándote
hoy dices que yo soy el culpable de
nuestra separación porque me canse,
y no escucharás de mi un te quiero,
porque ya tengo otros planes y de buscarte
no pierdas tú tiempo, que de volver
a esa vida que me diste no será fácil,
porque estoy lejos de ti de tus males.