IMPOSIBLE
Tu sonrisa es el viento del verano
cuando refresca en la sombra
y como el sol del invierno
cuando calienta en la luz.
Tus cabellos sueltos son abrazos
que me acarician a lo lejos
y que sueño poder alcanzar
alguna tarde, como aquellas,
en que comenzamos a hablar.
El resto de tu ser es para admirar.
Describirlo con palabras es imposible.
Todo tu cuerpo es para adorar
y tu voz particular me hace alegrar.
Y a riesgo de parecer simple
quiero decir, para terminar,
que todo lo que te escribo
solo en mis sueños estarán vivos
porque ser más que tu amigo
o tener algo contigo;
eso, sí, sería amarte en desafío.