No escribo porque alguien en particular me lea, o por fama, ni siquiera escribo por dinero, lo hago para conocerme, para sanarme, escribo para ser.
Ya vendrá la posteridad a decir si lo que escribí y lo que sigo escribiendo tiene algún valor comercial, literario, estético, intelectual o espiritual. Mientras tanto, continúo haciendo de esta vocación un oficio, una forma de ser en el mundo que no es mejor ni peor que otras formas de ser.
Agradezco a las palabras que me son substancia, alimento y aliento, camino y paisaje, porque son más que simples herramientas o insumos para escribir.
Alexander Elías2023
#SerEscritura