Perdón ser tan insistente,
Permíteme ser atrevido
Es que no sales de mi mente
Y mi sinceridad se ha desvestido
A veces sueño que estoy en el espacio,
en un universo alternativo,
sin ser nativo me siento parte
de la naturaleza de ese marte
mientras lo recorría despacio
En ocasiones lo veo como una rosa
o quizás otra cosa, de gran delicadeza,
como un instrumento de cuerdas,
que si no sabes tocar lo destrozas
y que a mi me recuerda
a sus curvas y gran belleza.
Abro los ojos y ahí estás
tan hermosa como siempre,
o tal vez un poco más.
La expresión de tu cara deja muda
a la razón y la locura se apodera
de mis ojos, que no vacilan por verte desnuda,
de mis manos susurrando al oído de tus caderas
y de mí, que me vengo pasando la frontera
Quizá haste el respeto se me olvidara
por jugar con tus senos encima de mi cara
pero no se me olvida el cariño y de nada
solo lo haría de modo que a ti te gustara.
Y para acabar me atrevo
a decirte que después de eso
sería capaz de decir:
Hagámoslo de nuevo.