Ronald Solano J

¡Dónde estás!

Este loco no puede olvidar lo dulce de tu piel...

El recuerdo de tus labios trae el más dulce recuerdo a mi paladar

y sin quererlo mi lugar común aparece 

sencillamente... Tengo ganas de llorar.

 Y no lloro tu partida,

tal vez nos  faltaron recuerdos por alimentar

noches a escondidas, 

una última mirada,

esas ganas locas de volar.

A esa dulce que fue mi amada

después de tantos años sigue siendo mi inspiración

en el carril del no retorno 

ahí... Ahí te espera mi corazón.