La sangre es roja cómo granate es el hematocrito,
grana es la rabia y la violencia del iracundo,
los ojos de la ira son fuego cómo la traición púrpura del asesino
que empuño el siniestro puñal manchándolo de rojo.
Senderos bermellones en la tierra de niños sin recuerdos,
sofocadas memorias de viejos ancestros,
visiones de celestes auroras en cielos ruborizados,
rosas rojas desaparecidas en el ocaso de los tiempos.
Rojo el magma del volcán cuando escupe lava,
lavas rojas de rojo infierno,
encarnada es la sangre derramada en cada guerra
y por eso roja son las vísceras de la madre tierra.