Lady of the Flowers

Mar y espuma.

Ni siquiera tienes idea de las tormentas que tuve que atravesar sola para poder entregarte una parte de la balsa en la cual navegue para llegar a ti; jamás te importaría, porque tú a la primera ola gigantesca y rayo electrico huiste despavorido a otra balsa que posiblemente te lleve a lugares inimaginables. 

 

Ni siquiera tienes idea de cuánto me costó ir juntando los trozos para construirme de nuevo, solo por ver tus malevolos ojos que iluminaban ese riachuelo que yo llamaba \"cariño\" y que con una sola de tus pulsaciónes me arrojabas lejos, más lejos de donde solía encontrarme.

 

Ni siquiera tienes idea del dolor que tuve por navegar desde un sitio al que nunca pertenecí y por llamarte \"tierra\" cuando ni siquiera había un diminuto espacio para esa \"parte\" de la balsa en la que deseaba llegar a

ti.

 

Ni siquiera te detuviste en pegar lo que habías roto con cada palabra y aliento que emanaba de ti; creabas una ola gigantesca que me revolcaba en la arena en lo profundo del mar, me sofocaba y me ahogaba, me hacía sentir sin aire en los pulmones.

 

Ni siquiera tienes idea, ni siquiera tienes corazón, ni siquiera tienes compasión, ni siquiera tienes tiempo y mucho menos luto.