Caracol caracolito
que te mueves despacito.
Aún con tu casa a cuestas
buscas siempre un rinconcito.
Y buscando el calor
caminas frente al sol.
Buscando ramitas verdes para
poderlas comer.
Caminando sin descanso
hasta el atardecer.
Y de todas las verduras
la lechuga es favorita.
La divisas desde lejos
con tus ojos de antenita.
Caracol, caracolito
que en mi jardín siempre estás.
Ojalá crecieras un poco
pues no te quiero pisar.
Desearía que corrieras.
Que de mí pudieras escapar.
Pero es que siempre vas lento,
sin prisa en tu caminar;
rumbo a mi jardín querido
donde siempre te suelo encontrar.