Caballo de fuego que te reflejas al ras del agua
del rio,
vuelas de un lado a otro auxiliando los campos
secos en pleno vuelo.
Entras impetuoso y sin permiso allanando las casas
en plena siesta,
Se escucha tu aletear descontrolado,
chapeas con el distintivo de aguacil y
tus colores vividos
tu cuerpo esvelto se prepara para la lucha
Migras...
Migras...
sometiendo plagas.
Eva Estella Parejas Manzanal
Silvia del valle Suarez
mr