Entre dos silencios cabe una vida, lo mismo
entre dos lágrimas,
y también la muerte.
Entre dos silencios caben todas las palabras,
un beso,
el último.
Entre nosotros cabe todo, menos el olvido.
Y aunque ahora no estas,
siempre voy hacia atrás, hacia el pasado
a encontrarte.
Se abren las puertas, totalmente, hasta el tope.
Se caen las paredes, los techos
de aire,
de pluma,
pasan todos en turba, con sus ruidos y sus
abismos,
y sus montañas de rocas.
¡Y entre nosotros no cabe nadie…!