No puedo ser la persona con la que sueñas y te imaginas
porque no soy del estilo que romantizará su depresión,
y tampoco vestire gótico,
porque no vengo de una familia disfuncional.
Seré más del estilo que disfruta de decorar
su casa con muñecos de jengibre hechos a mano.
No me gusta el alcohol amargo
y prefiero adormilarme con un toque frutal
acompañado de gomitas con forma de gusano.
Tampoco soy del estilo que desea vivir de arte y dibujando,
porque soy más de vivir en bata, experimentando y calculando.
No seré quien te insinúe cosas +18,
pero te demostraré mi amor en un lenguaje químico y complicado.
Tampoco he besado a muchas personas
inclusive hablarlo en plural ya es demasiado,
y tendré una corta experiencia en el campo de flores
llamado amor.
Así que no puedo ser la persona de tus sueños,
porque no quiero dejarte tirado llorando.
No puedo ser esa persona de cabello entintado,
pero si puedo ser la persona que te mostrará
un mundo de armonía con matices aromáticos
de gardenias y bugambilias.
Déjame ser la gardenia entre abundantes rosas que invaden tu mente de girasoles.