Cegados por la ambición,
optaron por la amnistía
para aquellos que, a traición,
obviando la Constitución,
cumplieron su felonía.
Por un puñado de votos
han vendido a su país,
dejando en manos de locos
decisiones de unos pocos
tiñendo a España de gris.
Con prófugos de la justicia,
hoy negocian en Bruselas
un acuerdo de inmundicia,
pues al firmarlo propicia
exonerarlos las penas.
Gobernantes codiciosos
son los que nos representan,
transformándose en tramposos
por salvar a codiciosos,
detentando lo que ostentan.
Los pecados capitales
simbolizan la ocasión,
los votos fundamentales,
los siete tan esenciales
para arruinar la nación.
Rebelión y sedición
atentan contra el estado
dividir, fue su intención
por ello en tal situación
justicia por lo causado.
Classman