Contando historias de mil mariposas
bajo la sombra de unos pinos estoy
caminando lentamente, bosque soy
un susurro llega al corazón.
Ese susurro vive la esperanza
de un encuentro
entre la carne y el alma.
Carne débil mirando el reló
y alma pura sosteniendo una larga pasión
la arena se agota
y con ella se van las mil mariposas.