Mi piel quiere ser tu refugio,
mi alma tu consuelo,
mi ser… la bahía
donde encalle tu barco
cuando mis manos sean…
el pincel que plasme
en tu cuerpo
la mejor obra de arte.
Quiero arder en tu fuego,
quemarme en tus llamas
y en una transmutación
fundir nuestras almas.
Mi corazón te implora,
mi voz te convoca.
Mis sentidos extrañan:
la sensación de tus manos,
cuando escribes en mi alma,
la dulzura de tu boca
cuando en versos me invocas,
la calidez de tu mirada
cuando al pasar me roza.
¡No quiero solo deseo!
¡Quiero amor en cada gesto!
¡No quiero solo pasión!
¡Quiero ser tu aurora…
no tu sombra!