Desnúdame lentamente
como si de otoño, quisieras ser el viento y mi cuerpo, un árbol que se resiste. Recorre todos los huesos de mi espalda, con la hoz caliente de tu tacto, delinea los ríos que se descosen, de mi poca carne intacta. . De la alquimia secreta de las palabras, madura dulce la granada en su trono, De la fragua ardiente de nuestras bocas, el hierro persiste en su dureza. No existe fuego sin luz, ni lluvia sin la tormenta, yo te absorbo gota a gota, como la estéril tierra, que necesita de tus líquidas manos, para alcanzar, su última primavera. . Desnúdame, de estas escamas de tela, de estas cadenas de vergüenza tímida, que quiero alcanzar, el origen de tus perfumes, las entrañas de tus secretos parabólicos, denúdame a machete, a guadaña, a brisa de albas lentas, desnúdame a besos, a suspiros profundos.
desnúdame....