Estábamos bajo el cielo,
y las gotitas de lluvia caían unas tras otras sobre nosotros,
nuestras risas eran fuertes;
sin querer bailábamos como locos en medio de la calle,
tus manos toparon con las mías,
y el universo se alegró.
Tus ojos marrones,
brazos fuertes,
altura encantadora,
y sonrisa perfecta.
es un secreto,
estas aquí clavado en mi corazón,
tu voz estremece mis sentidos,
y nace un sentimiento de dolor abismal;
os confieso que te necesito,
quiero abrazarte,
explicarte esto que me carcome.
pero lo sé...
eso nunca pasará, tu ser me olvidó y eso me mató.