La vida está en un laberinto
en donde se topa con el bien
si el buen juicio la acompaña
desoye el murmullo del mal
que está presto a inducir
de sus garras huye.
Le abre paso el misterio
en el zaguán, la utopía
con los brazos abiertos la recibe
su espíritu se convierte en ave
en sus alas a las vicisitudes lleva
le pide al viento las condense
en gotas de rocío, para que
lo prospero y adverso
se dispersen con equidad.